POR: ISAAC WISHLITZKI
Tomás Moro Utopía (1516); Francis Bacon: Nueva Atlántida(1627); Tommaso Campanella: La Ciudad del sol (1623)
Utopía es en términos actuales un paraíso socialista que hubieran envidiado Marx Engels y Lenin o, a lo mejor, para elaborar sus teorías comunistas se apoyaron leyendo Utopía de Tomás Moro.
La propiedad privada ha sido prácticamente eliminada, no existen diferencias sociales entre propietario y el que no lo es. El tiempo de trabajo eran seis horas divididas en tres por la mañana y tres por la tarde. En los espacios se acude a los comedores comunitarios para almorzar y posteriormente se toma el merecido descanso. Las mujeres trabajan exactamente igual que los hombres y tienen las mismas perrogativas y existen guarderías que sustituyen la función de la madre durante las horas de trabajo y de reposo.
Todos los enfermos son tratados en magníficos hospitales bajo la humanitaria atención de médicos y asistentes, ya que las enfermería no existía en esta época como tal sino hasta el advenimiento de la guerra de Crimen en donde aparece el primer esbozo de la enfermería formal con la aparición de Florencia Nightingale.
La eutanasia está permitida, pero los suicidas son tirados en un pozo sin asistencia religiosa. Los alimentos son repartidos en grandes almacenes y cada quién recibe lo que solicita sin contraprestaciones de ninguna especie. Dado que hay abundancia de todo, no existe el peligro de que alguien desee enriquecerse a costillas de los demás. De cualquier manera, el dinero no existe. Las puertas de las casas siempre están abiertas y se desprecian los metales finos y las piedras preciosas. El oro solo sirve para hacer bacinicas y cadenas para los esclavos.
Los habitantes se van a dormir a las ocho de la noche. Por las mañanas, antes del trabajo, los útopianos son dados a ir a escuchar conferencias ya que la formación intelectual es muy valorada y se fomentan los talentos especiales desde edad muy temprana y en los demás casos hay libertad de escoger la oferta educativa del estado que es magnifica. También se educa a las mujeres para que sean compañeras a la altura de sus esposos.
Claro, hasta aquí el modelo es más que aceptable pero, en la isla no se desea exagerar la espiritualización del matrimonio y se impone que los novios se vean desnudos antes de la boda en presencia de un acompañante. De esta manera se nota si el erotismo es suficiente y en caso contrario se nulifica la palabra de matrimonio así evitar los rompimientos que son castigados de maneras severísimas, draconianas porque el matrimonio se hizo para procrear y debe tener frutos forzosamente.
Los utopianos tienen mucho tiempo libre pero poco ocio, no existen tabernas, cantinas ni burdeles y viven con alto nivel de ética por que existen personas fuera de la sociedad, por ejemplo, los esclavos, criminales condenados a muerte en otros estados o personas que en otras sociedades trabajan como siervos o lacayos.
La religión de los utopianos es muy parecida al cristianismo. La utopía más conocida del siglo XV11 fué imaginada por Sir Francis Bacon que dicho sea de paso, es considerado como el mejor cerebro del renacimiento Inglés. Bacon, el candidato preferido para resolver la interrogante “¿Quién era realmente William Shakespeare?” fue el verdadero fundador de la ciencia moderna. Afirmó que toda certeza en el saber debe basarse en observaciones sistemáticas y en experimentos, cuando en ese tiempo tal cuestión no se daba por supuesta.
Escribe la Nueva Atlántida en 1627. El centro intelectual del Estado lo sitúa Bacon en las Islas Salomón descubiertas por los españoles en 1567. En ella trabajaban los sabios y los científicos sin controles estatales de ninguna especie, sin restricciones, inventando, investigando y experimentando, por supuesto, sin rebasar los limites éticos. Existían unos edificios enormes en donde reinaba un clima artificial y hasta se podía crear un arco iris. Se analizaban la sangre y la orina con ayuda de microscopios y se experimentaba con animales.
Tommaso Cammpanella estableció su utopía en Ceilán, en la Ciudad del sol. 1623. Dios se manifiesta como el Sol y junto a el se encuentran las tres personificaciones el poder, de la sabiduría y el amor. La Ciudad del Sol es un Estado centralizado: solo existe a propiedad colectiva, que es repartida por las autoridades. El estado regula el apareamiento de hombres mujeres de acuerdo al principio de la optimización de los factores hereditarios (Eugenesia). La copula tiene lugar cada tres días. Los hombres con un ímpetu sexual demasiado fuerte como para soportar los dos días de abstinencia, pueden satisfacerse con mujeres embarazadas o infértiles. Una mujer que no logra embarazarse puede entregarse a otro hombre y si así no se embaraza, pasa a ser un bien común de todos los hombres.
Hoy, en el 2010 resulta muy difícil comprender que la Ciudad Sol haya construido la visión de un Estado Ideal. Algo mas tolerable para los habitantes del siglo XX1 resultan las instalaciones técnicas de este estado, por ejemplo, se puede generar el clima, se dispone de luz artificial y los barcos son impulsados mecánicamente, en vez de usar velas y remeros.
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